Aspectos para el cultivo

Para la siembra, se utiliza suelos arenosos y previamente tratados con los desinfectantes más adecuados.

Las parcelas son inspeccionadas por técnicos y expertos en cultivo de la planta de fresa, para determinar los productos fitosanitarios a utilizar y los abonos a aplicar.

Durante el crecimiento de la planta, se exige un seguimiento exhaustivo para el control de las posibles plagas existentes.

En el arranque, se utiliza las maquinarias específicas de alta tecnología que permitan el mejor tratamiento para la planta.

El proceso de selección se realiza de forma manual, estableciendo controles exhaustivos para conseguir una selección  de calidad (madurez de la planta, tamaño de raíces, grosor del cuello, etc…). En función de las variedades producidas y de los pedidos, se realiza un determinado envasado posteriormente a una determinada conservación de la planta.